Crónica del día
¡NUEVA MODALIDAD DE
“VENGANZA” PASIONAL!
Marido se “asocia” con el amante de su mujer
Raúl Mestre.
En un mundo sensato, se podría decir que las infidelidades no constituyen noticia. Pero el sábado me comentaron un caso que me dejó viendo un “chispero”. Aparentemente era una noticia intrascendente, mejor dicho, una tontería: “En la ciudadela atracaron una pareja”.
En una ciudad donde cada día hay un atraco, pregunté: ¡Aja! ¿Qué gran noticia es esa?. Claro, yo no sospechaba que detrás del “atraco” se escondía una nueva modalidad de “crimen pasional”.
Un hombre “enloquecido por los celos” se “compinchó” con el amante de su mujer (no me explico como lo convenció para que aceptara semejante trato) para que “unos sujetos” simularan un atraco y le dieran una paliza a su propia esposa.
Una señora, a quien llamaremos Doña Patricia, quien vive en un segundo piso de los bloques de la ciudadela, y quien es muy criticada, porque permanece toda la noche mirando por la ventana, (las vecinas “malpensadas” dicen que ella lo que anda es pendiente de la vida ajena), fue quien nos explicó el caso: “hacia las dos de la mañana, dos sujetos que venían en una moto; abordaron con arma de fuego a “una pareja” que regresaban de los estaderos del sector, abrazados por la mitad de la calle, caminando hacia los bloques” pero los “atracadores” solo se limitaban a golpear a la mujer, mientras “su amante”, -como dice la loca del Perú- permanecía cruzado de brazos, viendo la paliza que le estaban dando a la pobre mujer.
Doña Patricia, (quien nos dice que todos los días lee esta crónica) cuenta que aprovechando la luz del poste del alumbrado público, reconoció (por una blusa ombliguera que la muchacha compró en Metrocentro) a la dama que estaba siendo golpeada y de inmediato se fue al bloque donde ella vive y le contó al marido de la infortunada mujer, lo que le estaba ocurriendo a su esposa.
“Pero ese señor es un “fresco” –dice doña Patricia- “una pecueca que llaman”, en lugar de levantarse y socorrer a su mujer, lo que hizo fue insultarme diciendo que no se iba a levantar a esa hora y que tenia mucho sueño y que además soy una vieja chismosa.” ¿Qué tal? ¡Atrevido! Decirme chismosa.
“Decepcionada regresé a la ventana –concluye doña Patry- y me quedé un rato viendo a ver si veía una patrulla de la policía, pero cuando vi que “el amante” al ver a la mujer inconsciente, tirada en el suelo, se “secreteó” con los supuestos “atracadores” y se despidió chocándose con las manos empuñadas, (así como se saludan los marihuaneros) entré en sospechas: “El tipo que venia con la muchacha, estaba “encompinchado” con el marido de ella. Con razón no hizo nada y por esa misma razón el otro no quiso levantarse para auxiliarla”
Al día siguiente la mujer miró con sorpresa que el noticiero dijo que disque “Atracaron una pareja en la ciudadela” cuando ella sabia que no hubo ningún atraco, sino: ¡Una nueva modalidad de venganza pasional, donde los maridos se asocian o se “encompichan” con el amante de su mujer, para cascarla.
“O sea –termina diciendo la mujer- que ahora no solo debemos cuidarnos de las golpizas de nuestro propio esposo, sino de “la deslealtad del amante” o sea que ya no podemos echar una canita al aire. Por eso una tiene que ver con quien se “enreda”.
