viernes, 23 de septiembre de 2011

¡ASPIRA A QUE SU “ESPOSO” LA INDEMNICE POR FALTA DE SEXO!

*La última vez fue, cuando el hombre llegó a la luna”
Raúl Mestre
El prestigioso diario francés «Le Parisien» publicó hace unos días, una noticia preocupante: “Un hombre de 51 años tendrá que pagar 10.000 a su ex-esposa por no haber tenido relaciones sexuales con ella durante varios años.
Una vecina del barrio Olaya en Barranquilla, cuyo esposo hace años que “ni raja ni presta el hacha”, al leer la noticia en la LIBERTAD , se emocionó, tomó su cartera y se fue corriendo en busca de un abogado “porque si a esa mujer allá le dieron 10.000 dólares, aquí un juez ordenará que mi “esposo” me pague el doble”
Según, el diario francés, Jean-Louis G, alegó que no tenia relaciones sexuales porque sufría «una fatiga crónica generada por los horarios de trabajo», sin embargo, el Tribunal de Apelación de Aix en Provence, lo condenó por «ausencia de relaciones sexuales durante varios años»,
De acuerdo con las agencias internacionales, el tribunal no aceptó sus alegaciones; porque «Jean-Louis G. no justificó los problemas de salud que le hacían totalmente incapaz de tener relaciones íntimas con su esposa»,
La vecina del barrio Olaya, al enterarse de esa “justificación”, dijo: “El mío menos puede decir eso, porque a él no le duele nada y además cada rato lo ven bailando y tomando con sus amigos en todos los estaderos de Barranquilla.”
La esposa, de «Jean-Louis G, por su parte, no dijo con qué frecuencia hubiera querido tener sexo con su marido, pero señaló «Le Parisien», que con lagrimas en los ojos, recordó que la última vez que “vio las estrellas” fue una noche del 20 de julio de 1969, o sea, cuando el hombre llegó a la luna
“Bueno, siquiera ella se acuerda -dijo la vecina del barrio Olaya-, porque yo no recuerdo “cuando fue la ultima vez” y mucho menos que me hubiera puesto a ver estrellas…Mi marido no sabe que el sexo es bueno para la salud, que mejora el sistema cardiovascular, que evita problemas cardíacos, en fin, la actividad sexual eleva la autoestima, estimula la creatividad, promueve el autoconocimiento y revitaliza. ¡Una vida amorosa activa es un magnífico antídoto contra los problemas mentales y existe evidencia de que “después de un coito placentero”, el cuerpo produce reacciones bioquímicas, sustancias que nos ayudan a mantenernos mucho mejor”.