Algunos “amigos” cuando me ven feliz; meditando, mientras me fumo un cigarrillo, se me acercan, convencidos que son los primeros en aconsejarme: "Raúl, fumar hace daño".
Y lo mejor del cuento es que me lo dicen con una cara, “como si acabaran de descubrir la médula para reemplazar las células destruidas por la quimioterapia”.
Yo, generalmente no digo nada, pero, pienso en silencio: "¿Sí?, No 'jodás'... de verdad que, como cuando chiquito me caí de la cama, no lo había pensado. Lo que no sabe “el amigo” es que es el 'científico' número 30 mil, que me dice lo mismo, en un mismo mes, es decir, de a mil por día.