SECUESTRO, Y MUERTE DEL PRIMER
“PLAGIADO” QUE HUBO EN COLOMBIA.
*Harold Eder, José Raquel Mercado y Gloria Lara de Echeverri
Raúl Mestre
“Quien de joven no fue comunista, no tenía corazón, pero si de viejo continua siéndolo, es que no tiene cabeza”. Willy Brandt,
Un 19 de abril de hace varios años, fui a Palmira, Valle, en compañía de un amigo a quien conozco desde aquellos tiempos felices en que con solo 14 añitos asistimos al IX Congreso del partido comunista,( acto en el cual fue aprobada la tesis de la "combinación de todas las formas de lucha revolucionaria"), y nos sucedió un hecho que todavía me tiene pensando.
Mientras dialogábamos en una cafetería, en el centro de aquella hermosa ciudad, con una reconocida escritora de “Notas de Sociedad” le preguntamos a esta mujer moderna y descompilada: ¿Por qué el principal centro educativo de Palmira, se llama Harold Eder?, Y la mujer se apresuró a responder: “ Porque Harold Eder fue el mas importante industrial vallecaucano, fundador del Ingenio “Manuelita” y benefactor de la obra social “el Minuto de Dios” y uno de los primeros plagiados que hubo en Colombia y nos recordó que ese empresario había muerto en cautiverio, en 1965.
El compañero a quien todavía hoy, después de tantos años, le “mamo gallo” porque continua siendo comunista, después de escuchar la respuesta de la escritora, se quedo mirando lejos y luego, así como “medio arrepentido”, dijo: “Gran parte de las recientes tragedias colombianas provienen de aquella decisión tomada por el PCC en el IX Congreso en el cual se aprobó la tesis de la "combinación de todas las formas de lucha revolucionaria".
Uno de los primeros ejemplos de tan macabra iniciativa –continuo diciendo- fue casualmente el secuestro y muerte de Harold Eder. Eso volvió la política colombiana una pesadilla de violencia y confusión y, como si ello no fuera suficiente, recordó como años después en Febrero de 1976, secuestraron y asesinaron al líder sindical José Raquel Mercado, Presidente de la Confederación de Trabajadores de Colombia CTC, un acérrimo anticomunista.
Este hombre, sin haberse tomado un trago, también habló de los hechos ocurridos el 29 de noviembre de 1982 cuando un grupo denominado Organización Revolucionaria del Pueblo (ORP) secuestró a Gloria Lara de Echeverri, (nieta de Don Oliverio Lara) y quien al momento del secuestro se desempeñaba como Directora Nacional de la Acción Comunal. “Su cuerpo fue encontrado en el barrio Bonanza en Bogotá, con un disparo en la nuca y signos de desnutrición, envuelto en una bandera con las letras ORP”.
Y finalmente el amigo “comunista”, se refirió al dirigente conservador, Álvaro Gómez Hurtado, quien fue secuestrado por un comando del M-19. (Por fortuna liberado sano y salvo 53 días después). Y concluyó diciendo: Afortunadamente los tiempos han cambiado y, la imagen de ese campesino de 1964, que Marulanda describía en sus “Cuadernos de Campaña” o por Arenas en el “Diario de la resistencia de Marquetalia”, no son los campesinos de nuestro tiempo. El campesino de hoy día –agregó- tiene las herramientas para romper el mito guerrillero, para incrementar su productividad y para insertarse como ciudadano en la vida democrática del país.
La escritora tomó una servilleta se la pasó por los labios y dijo en voz baja- Todo eso es cierto pero si hay una labor más eficaz por parte del Estado, Por ello, hoy, cuando las regiones se han ido consolidando institucionalmente, especialmente en aquellos lugares donde la presencia estatal ha sido históricamente precaria, se requiere de un nuevo liderazgo campesino. Uno que rompa con los paradigmas organizativos implementados por las guerrillas. Éste es el verdadero desafío del Estado, un reto que, de no emprenderse, continuará ofreciendo un espacio y una posibilidad de desarrollo a otras futuras formas de violencia.